¡Muchas opciones!
El siglo XIX, sin duda, fue uno de los más extraños en la historia de la humanidad. Posiblemente las transiciones tecnológicas y culturales que sufrió el mundo durante ese periodo fueron las culpables del cambio en el pensamiento del hombre; las que hablaban acerca del mundo cambiaron drásticamente, tanto así que incluso las fijaciones sexuales se tornaron un tanto extrañas. Si bien en países como China, había desde hace siglos una fijación por los pies de las mujeres, en varios países de Europa la belleza natural de estos era de suma importancia, incluso para enamorarse. Tanto fue el peso que se le dio a estos miembros que el hecho de ver a una dama mostrando a un hombre sus pies desnudos era una indiscutible invitación para intimidad. De la mano de esta fijación retratada en novelas de la época como “María” de Jorge Isaacs, apareció la necesidad de que la industria del calzado pusiera más esfuerzo en fabricar verdaderas piezas de arte que resaltasen la belleza de los pies de las mujeres. Fue así como los clásicos botines con tacón le dieron paso a una gran variedad de zapatos que hasta nuestros días siguen dando de qué hablar.
Con tantas opciones de dónde escoger, lo único que queda ahora es resolver uno de los problemas más grandes en cuestión de calzado: la estética de los pies. Si bien hay calzado hermoso y de gran calidad, también hay pies que le quitan toda la belleza a estas piezas; quizá tú sufras este tipo de problemas, si es el caso, puedes revisar algunos de estos consejos para que, a pesar de la apariencia de tus pies, estos luzcan de maravilla. Si quieres usar tacos, pero tienes un serio problema con el aspecto de los dedos de tus pies, puedes usar peep toes, que tienen un diseño más cerrado que el resto de los tacos.
Sabemos que usar chalas es un verdadero lío cuando tus pies no son precisamente los más lindos, sin embargo es posible introducirlas a tu outfit diario si eliges algunas con correas anchas. De esta manera podrás cubrir un poco las imperfecciones que te impiden sentirte segura.
De la misma manera que las correas anchas, los adornos al centro son un distractor perfecto para que los pies que terminan en dedos como garras no luzcan del todo mal o simplemente no atraigan las miradas.
De la misma manera que las correas anchas, los adornos al centro son un distractor perfecto para que los pies que terminan en dedos como garras no luzcan del todo mal o simplemente no atraigan las miradas.
Si tus pies son anchos, considera no usar zapatos con puntas afiladas, cuando estos son usados en los pies incorrectos pueden dar el efecto de que un pie es más gordo de lo que es en realidad. En ocasiones lo mejor es usar zapatos con puntas redondeadas y evitar a toda costa los colores nude.
Hay quienes simplemente no nacieron para usar tacos, si éste es tu caso, es mejor que optes por chalas o zapatos bajos. Cuando alguien tiene los pies cansados debido a que no están acostumbrados a los tacones, éstos tienden a hincharse dando un efecto horrible.
Si la parte de tus dedos es demasiado ancha, es posible que al usar sandalias tu dedo meñique intente escaparse del zapato. Esa es una de las situaciones más vergonzosas a la hora de usar sandalias, para evitarlo puedes usar calzado que cubra tus pies a los lados para mantener tus dedos en su lugar.
Sea cual sea la connotación que hoy tenga la belleza de los pies, es importante saber que incluso esta parte de nuestro cuerpo a la que normalmente no le prestamos mucha atención, en realidad atrae más miradas de las que pensamos, por tal motivo, es preciso mantenerlos siempre en buen estado y procurar su belleza para evitar que destruyan cualquier outfit.